Una peligrosa y silenciosa enfermedad, la hipertensión arterial

En nuestro país, la hipertensión es un problema de salud pública, debido a la cantidad de personas que la sufren, muchos de ellos sin saber que la padecen; es una enfermedad que ataca a las personas en plena edad productiva y sus costos de tratamiento son altos y de por vida.

Se trata de una enfermedad de etiología múltiple, que produce daño vascular sistémico, precipita la aparición de enfermedades cardiovasculares y aumenta el peligro de muerte; no se le puede tomar a la ligera e impone a las personas que, con regularidad y disciplina, se hagan sus controles de presión sanguínea y otros exámenes, para descartarla y, si aparece, tratarla en sus etapas iniciales o primarias que, por lo general, sólo exigen para controlarla un simple cambio de estilo de vida y de alimentación, en vez de recurrir a un tratamiento con fármacos.

La hipertensión sin control ataca a otros órganos, como corazón, pulmones, riñones, produciendo daños extensivos. Repetimos, si se diagnostica a tiempo, con unos sencillos exámenes, pueden eliminarse los factores de riesgo, entre los que se encuentran la adicción al tabaco y al alcohol, una dieta desordenada, una vida sedentaria, componentes hereditarios, tendencia a la diabetes, obesidad, manejo inadecuado de presiones y conflictos de la vida diaria, entre otros.

Si ya hay señales de hipertensión en etapa secundaria se hace necesario imponer un tratamiento farmacológico. Afortunadamente, hoy se cuenta con una serie de medicamentos que controlan, de manera efectiva, las diversas manifestaciones de la hipertensión, y Laboratorios Kimiceg se enorgullece de poderlos ofrecer al mercado venezolano; son productos de altísima calidad pero, lo más importante, es que su médico le auxilie en prevenir la enfermedad y eso sólo se logra con visitas y controles regulares de su salud arterial.