Trastorno por Estrés Crónico

Desde el inicio del confinamiento, los profesionales de la salud mental pronosticaban la aparición de trastornos asociados al estrés, tales como la irritabilidad, los dolores musculares, las alteraciones del sueño, la ansiedad y los pensamientos negativos.

Las estadísticas revelan que cada día se registran más consultas médicas por concepto de colapso mental y emocional, como consecuencia de la situación mundial que se vive, mientras que los expertos alertan a la población ante los síntomas vinculados al estrés malsano; señalando que la gente busca ayuda cuando se sienten al límite, experimentando taquicardia, depresión o ataques de pánico.

El estrés crónico puede gestarse durante días, meses o años por diversas causas. En principio, es evidente que algo no marcha bien en el sistema nervioso, no obstante, el paciente permanece en alerta constante y se habitúa a vivir así. 

¿Cómo sé si tengo estrés crónico? Es una enfermedad compleja de diagnosticar sin asesoría médica, tanto para el paciente como para su entorno cercano. La sintomatología principal es la intolerancia, el desgano, la dificultad para respirar, el sentimiento de agobio, la hipersensibilidad, el aturdimiento mental y la pérdida del deseo sexual.

Los especialistas explican que cuando una persona desarrolla estrés crónico, la convivencia con los demás se torna difícil. El individuo se siente extraño, incomprendido, desconectado de sí mismo e incapacitado para afrontar los asuntos cotidianos. Así mismo, pueden aparecer rasgos depresivos y los familiares no se percatan.  

Las personas necesitan canalizar el estrés y relajarse. Es importante crear hábitos, dormir siempre a la misma hora, hacer ejercicios, tomar sol y abandonar las noticias. Desde el punto de vista psicológico, es sano reconocer los límites propios ante las presiones externas del día a día. Si presenta varios síntomas de los mencionados, busca ayuda psiquiátrica. 

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