13 Sep Medicamentos de Alto Riesgo
Los medicamentos de alto riesgo son composiciones que de acuerdo a sus características, poseen alta probabilidad de ocasionar efectos graves e irreversibles en la salud. Contrario a lo que se piensa, no están exentos de toxicidad y forman parte de un espectro distinto en el campo de la medicina.
Cuando se emplean estos fármacos, la seguridad del paciente pasa a ser un factor relevante, tanto por la naturaleza de los mismos, como por el rango mínimo de equivocación que existe durante su ingesta. Son sustancias muy delicadas que deben suministrarse a la medida, a la hora exacta y por la vía adecuada, aseguran los expertos.
De acuerdo a las investigaciones, la mayoría de las reacciones adversas tienen su origen en la mezcla de medicamentos, en la sobredosificación, en la prescripción confusa y en la negligencia médica. Otros riesgos ineludibles pueden tener lugar aunque se tome el tratamiento de forma correcta.
Dentro del grupo de medicinas de alto riesgo, encontramos las insulinas, los psicotrópicos, los anticoagulantes, los sedantes, los narcóticos, los tratamientos oncológicos y otros. Estos fármacos mal administrados pueden provocar síntomas leves como dolor de cabeza, mareos, sudoración, hemorragias e incluso causar la muerte.
Hay que evitar las confusiones en la práctica clínica, el uso inadecuado de abreviaturas, símbolos e indicaciones poco legibles. De allí la importancia de que se establezca un plan terapéutico claro y transparente entre el personal médico y el paciente, donde no exista probabilidades de incurrir en un error.
A pesar de que son productos elaborados por personas altamente calificadas y bajo estrictas normas de calidad, los medicamentos de alto riesgo, tienen un grado elevado de toxicidad para el organismo. Nunca manipule este tipo de medicinas sin orientación médica.