El riesgo de triturar los medicamentos

¿Sabías que si trituras las pastillas pueden perder la concentración y la efectividad? Machacar las tabletas es una práctica errada pero muy común. Los expertos advierten que cambiar las características físicas de los medicamentos, puede ocasionar daños a la salud. Es fundamental preservar tanto la dosis recetada como la naturaleza del fármaco, aseguran.

La mayoría de las personas intentan manipular las medicinas cuando no se las pueden tomar, cuando hay náuseas, vómitos o simplemente la pastilla es muy grande, sin embargo, lo apropiado es consultar si existen otras vías de administración. Las tabletas que traen una línea divisoria, se pueden cortar con seguridad.

Cuando un tratamiento es a base de cápsulas, no deben tomarse sin la cubierta. La capa gelatinosa de estas composiciones evita la interacción química, encubre el sabor de la sustancia y permite la liberación controlada en el organismo.

Los estudios psicológicos aseveran que algunos problemas de deglución se vinculan al miedo de tener algo atascado en la garganta. En otros escenarios, la dificultad para tragar, conocida como disfagia, se asocia a diversas causas físicas y ocurre con mucha frecuencia en personas mayores.   

Cuando las medicinas tienen una vía única de administración, la persona tiene que buscar la forma de mejorar la ingesta, haciendo respiraciones profundas o tomando la dosis con un poco de líquido. Las cápsulas se pueden lubricar con la humedad de la boca en pocos segundos.

Hay que tener en cuenta que algunos fármacos no se manipulan bajo ningún concepto, entre estos, los de liberación retardada, los de cubierta entérica y aquellos que se colocan debajo de la lengua. La forma farmacéutica de las medicinas previene los riesgos de intoxicación y garantiza la acción efectiva en el organismo.  

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