25 Sep Antimicótico Pie de Atleta
Casi todas las personas sufren de alguna infección por hongos en la piel en algún momento en su vida, y una de esas infecciones es el Pie de Atleta -o Tinea Pedia, Tiiña Inguinal o Tiña Cruris– que se presenta tanto en jóvenes como adultos, pero sobretodo en hombres.
El Pie de Atleta es una infección del tipo micótica, o sea, originada por hongos microscópicos y que se desarrolla en especial en la zona de los pies, en particular entre los dedos. Este tipo de infección se origina por el desarrollo del hongo del tipo “tiña” que busca condiciones favorables de calor y humedad (pies mojados, sudorosos) y que produce síntomas como la picazón, el ardor y el enrojecimiento que pueden llevar al desarrollo de llagas, costras y hasta ampollas. Al presentarse grietas y ulceraciones con escamas esto se convierte en un claro síntoma del avanzado estado de esta dolencia infecciosa, así como la presencia del olor característica de esta etapa clínica.
El contagio del Pie de Atleta es de cuidado por su peculiar forma de transmitirse, pues se puede adquirir fácilmente en áreas de poco tratado sanitario en piscinas, baños públicos, duchas compartidas, colegios, cuarteles, hoteles y a través de alfombras y toallas contaminadas. Si la persona suda mucho o usa calzado cerrado como botas está propenso a desarrollar esta infección.
La persona infectada puede presentar tres tipos de Pie de Atleta:
1.- Digital: que se desarrolla a nivel de los dedos de los pies y entre sus comisuras. De no tratarse puede extenderse a otras zonas.
2.- Mocasín: la infección se extiende por la planta del pie y sus laterales. Se presenta resequedad con picazón y áreas afectadas notablemente con características escamosas.
3.- Vesicular: Este tipo de infección no es muy común, pero desarrolla unas llagas llenas de líquido en la planta del pie, hacia los laterales e incluso en el talón, que de no tratarse puede llegar hasta la parte superior del miembro.
La prevención del contagio de esta infección se basa en los cuidados e higiene respecto al uso de toallas limpias y no compartidas, como también la disposición de zapatillas para los baños públicos y piscinas. El tratamiento indicado es el uso de un antimicótico de uso tópico como el Terbinafina, y aunque los hay de administración vía oral para casos crónicos que acompañan a la crema aplicada en la zona afectad, esta última es la que presenta la mayor efectividad contra los hongos microscópicos que desarrollan la tipología del Pie de Atleta o Tinea Pedia. Hay que tomar en cuenta que se puede presentar resistencia al antimicótico por lo que de presentarse el caso se recomienda consultar al médico especialista.